El 'Super Sunday' fue sensacional

No quería entrar ha valorar el tema que ha invadido la 'blogosfera' los ultimos días, pues son muchos los blogs que han hablado del Super Sunday que se vivió en Inglaterra el pasado fin de semana. Dos partidazos que se hicieron notar y no decepcionaron al gran público, el Manchester pasó por encima del Liverpool y solventó mis expectativas de sobremanera.

Mascherano fue la principal clave del partido, aunque personalmente pienso que hubieramos ganado de todas formas, ya que Ferguson ganó la batalla táctica a Benítez colocando una especie de trivote formado por Anderson, Scholes y Carrick en la media. Más aún cuando el argentino se autoexpulsó protestando al árbitro cuando ya tenía una amarilla. Comenzó el choque en Old Trafford con la afición mancuniana animada, sin parar de cantar. Reina estuvo muy inseguro bajo portería, y tan solo su buena actuación en los mano a mano -aunque más bien lo veo como fallo de los delanteros- consiguió lavar su mala imagen creada a raíz de sus dos fallos por alto, que costaron dos goles, el primero de Wes Brown, y el segundo, una vez más de Cristiano Ronaldo, que pese a volver a marcar no ha estado acertado en un partido crucial para el equipo. Deberá estar más activo en los proximos partidos importantes -Roma en Champions y la visita a Stamford Bridge principalmente-, si queremos aspirar a algo más que la Premier League. En la segunda parte el Liverpool no pudo hacer más que tratar de aguantar las acometidas del Manchester e intentar armar alguna contra, pero nunca hubo una verdadera sensación de peligro en la portería de Van der Sar. Hasta que llegó el tercero, en una jugada de tiralineas que Nani culminó de forma expectacular. Fiesta en Manchester ante una goleada histórica.

Una pena que el Chelsea - Arsenal (2-1) se disputase a las cinco de la tarde, coincidió con el Betis, que consiguió derrotar a Osasuna en su feudo, otra victoria más como visitantes, y ya van siete. Un partido feo de los de Chaparro, pero a estas alturas no tengo ni fuerza ni ganas de pedirle buen juego al trianero, lo que importa es llevarse los tres puntos y conseguir la salvación de una vez por todas e intentar borrar esta temporada de nuestras memorias -se me va a acumular el trabajo, aún estoy intentado olvidar la pasada-. Casto estuvo expectacular, y junto con los centrales -Melli y Juanito- consiguió armar un frontón infranqueable. Un Betis rancio, sin juego, que consiguió adelantarse tras la renaudación por medio de una certera falta lanzada por Mark Gonzalez, que se ha re-encontrado con su mejor nivel tras comenzar el año con mal pie.