Un penalty injusto en el minuto noventa y tres puso justicia en el marcador, aunque probablemente lo más correcto hubiera sido una victoria para Austria, que se hinchó a tener ocasiones. Los anfitriones, a falta de calidad e individualidades, tiraron de casta y fuerza para mantenerse vivos hasta la última jornada.
En los primeros quince minutos los austriacos salieron a matar, literalmente, a los polacos, sin embargo, la falta de puntería de Harnik y Korkmaz y la certeza de Boruc dejó a los locales sin premio. Y se sucedían las ocasiones, una detrás de otra, con Austria echada muy arriba, Linz desaparecido totalmente. Ivanschitz era el que llevaba la manija en el centro del campo, y Prödl ponía la contundencia en la defensa y en las jugadas a balón parado. Además se animó un par de veces a salir de la cueva. Pero esto es fútbol, y el que perdona lo paga. Exactamente eso le pasó a Austria, perdonó, perdonó y volvió a perdonar, hasta que en una jugada llena de infortunios Guerreiro puso por delante a Polonia. Increíble, sí, pero esto es fútbol.
En la segunda parte los austriacos salieron más tranquilos, y con menos fútbol. Polonia controlaba el partido cómodamente, Guerreiro brillaba con luz propia, mientras Hickersberger metía delanteros al terreno de juego; Vastic y Kienast fueron los primeros en entrar al campo. Polonia se fue relajando y no mató el encuentro, y como hemos dicho antes, esto es fútbol. Austria se volvió a crecer, aunque con menos intensidad, y en el minuto noventa y tres obtuvieron un premio merecidísimo. Penalty que se encargó de transformar Vastic, que había entrado en el terreno de juego en la segunda parte.
- El Hombre del Partido
Boruc, sin duda. Salvó el encutro para los suyos en varias ocasiones. Rindió a un gran nivel, tanto en las salidas como en los uno contra uno. El guardameta del Celtic despejó las dudas que aún tenían algunos polacos sobre él con una gra actuación. Si hubiera parado el penalty se convierte en el héroe nacional vamos...
- La sorpresa
Y repite como sorpresa, más que nada porque no deja de sorprenderme, Roger Guerreiro. Hizó un partidazo, sobre todo en la segunda mitad, ya que en la primera estuvo algo más ausente. Pese a todo, se echó a su país adoptivo a la espalda y consiguió el gol que les ponía por delante. Dejó detalles técnicos de gran calidad, y la Eurocopa se está conviertiendo en su escaparate para las grandes ligas. Veremos donde acaba en este verano.
12 de junio de 2008
Eurocopa 2008 | Un penalty injusto pone justicia en el marcador
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2 comentarios:
el penalti fue claro. Agarrón dentro del área pues penalti. Lo que ocurre es que muchos defensas se han acostumbrando a agarrar y que no pase nada.
un abrazo.
Buen titular. Guerreiro deja destellos de clase pero creo que le falta algo. Saludos
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