¿Efecto Barça?

Mal partido el que hemos presenciado hoy en Anfield por parte del Manchester United, en el que los Reds Devil fueron un equipo sin ideas, y se vieron muy inferiores ante un Liverpool que tendrá que recapacitar sobre el estílo de juego que quiere tener a partir de ahora.

Ante este partido me surge una pregunta, ¿Estamos ante un nuevo Barça?

Veamos la trayectoria que sufrió el Barça hace cuatro años, cuando ganaron la liga. Fútbol que maravilla, se gana el campeonato liguero con una supremacía impresionante, sin embargo calleron eliminados de la Champions a las primeras de cambio.

Un año después, consiguen la liga, con menos brillantez pero la misma seguridad que el año anterior. Además, consiguen su segunda Champions League, con un fútbol más práctico. Pasa un año, y las dudas, Ronaldinho, y los conflictos extradeportivos dejan al equipo blaugrana en la cuneta, con muchísimas críticas a la gestión del equipo, algo de lo que todavía se está recuperando.

Vayamos ahora con el Manchester United, nos remontamos dos años. El Manchester se presenta como el 'capo' a batir en Europa, con un juego brillante, atrayente, dinámico... algunos lo denominaron el fútbol total. Sin embargo, un tropezón contra el Milán nos deja fuera de la Champions en cuartos. Decepción general, que se acaba olvidando al ganar la liga. Un año después, se revalida el título de liga, con menos supremacía que el año anterior. Pero se consigue ganar la liga de campeones.

Muchas similitudes que hacen que la reflexión no pueda ser tachada de incoerencia. Este año se ha ido Queiroz, y no tenemos a Ronaldo hasta el partido ante el Villarreal, y sinceramente tengo algunas dudas sobre el rendimiento que pueda ofrecer el portugués esta temporada. Vuelvo al tema de Carlos Queiroz. Un asunto que me tiene realmente preocupado. El actual seleccionador de Portugal era esencial, el que más sabía de tácticas dentro del vestuario. Hoy, viendo el partido, me fijé en que Ferguson no se dignó a levantarse de su silla en los noventa minutos, mientras que Benítez estuvo dando ordenes durante todo el partido.

Se notó en el partido la falta de desborde, y Berbatov no es un superclase, no es capaz de hacer maravillas, pese a que es un grandísimo jugador. En el papel somos muy superiores al Liverpool, sobre todo si éstos carecen de Gerrard y Torres. El fútbol es más fácil de lo que algunos quieren hacernos ver. El que sabe tirar a puerta, que tire, el que sepa desbordar, que desborde... pero nos complicamos la vida en exceso. Van der Sar; Brown, Vidic, Ferdinand, Evra; Scholes, Carrick; Anderson, Rooney, Tévez y Berbatov. Este fue el once con el que se presentó el equipo mancuniano en el seno red. Vemos la primera, y quizá única incoerencia en Anderson. No es un hombre de banda, no sabe desbordar, y estuvo desubicado los primeros minutos, hasta que se cambió el esquema (o se intentó), del 4-2-4, al 4-2-3-1. Más tarde, Carrick se tuvo que retirar lesionado. Otro cambio de esquema por intentar lo dificil. Lo, llamemoslo, coerente, hubiese sido cambiarlo por Hargreaves (que salió más tarde), pero no, salió Giggs, que demostró que está en horas bajas, al igual que los demás veteranos del equipo (Scholes y Van der Sar). Vuelta al 4-2-4. El equipo desconcertado y, por tanto, desorganizado. Un caos comparado con el equipo que se tenía en frente, muy colocado y con las ideas perfectamente claras, antes del partido. Se echó, además, mucho de menos, a Ronaldo. La capacidad de desborde del portugués, la sensación de peligro, o el poder dar el balón a alguien capaz de hacer una maravilla que te resuelva el partido.

Veremos que nos depara la temporada, pero no tengo buenos augurios. Espero equivocarme. Cristiano, vuelve... y tráete a Queiroz.